Apple llevaría trabajando en un proyecto secreto de monitorización de glucosa en sangre más de diez años y estaría intentando integrarlo en los futuros Apple Watch.
Parece que Apple tiene entre manos un desconocido y curioso proyecto, por ahora secreto, que tiene como objetivo llevar al mercado tecnología de monitoreo de glucosa en sangre para diabéticos no invasiva, según informa Mark Gurman para Bloomberg.
Hasta el momento se dice que el dispositivo funciona con dos tecnologías, fotónica de silicio y espectroscopia de absorción óptica, y estaría destinado a medir el reflejo de la luz láser dirigida a una zona debajo de la piel para determinar los niveles de glucosa.
Lo más curioso de esta idea es que parece que el proyecto, conocido como E5, comenzó en 2010 después de que el cofundador de Apple, Steve Jobs, ordenara a la empresa que comprara RareLight, que promocionaba un nuevo enfoque para el control no invasivo de la glucosa en sangre. Explican que Apple estaría ahora intentando integrar esta novedad en el Apple Watch.
Todo este proceso permitiría medir la glucosa en sangre sin necesidad de realizar ningún pinchazo. Pese a que ya se han realizado varias pruebas, por el momento se desconocen sus resultados o el futuro de esta tecnología.
El proyecto secreto de Apple
Según se explica, la tecnología empleada utiliza láseres para emitir ciertas longitudes de onda de luz en un área debajo de la piel. Luego, esa luz se refleja de regreso al sensor para indicar la concentración de glucosa. Tras este proceso, es un algoritmo el que determina el nivel de glucosa en sangre de la persona.
Durante los últimos diez años, Apple ha estado probando la tecnología en cientos de personas, informa Gurman.
En cuanto a los ensayos en humanos, informan de que se usó la tecnología en personas que no saben si son diabéticas, personas con prediabetes y personas con diabetes tipo 2. Luego, Apple comparó su tecnología con las pruebas de sangre extraída de las venas, así como con muestras mediante el pinchazo típico en la piel.
Y es que, parece que uno de los grandes objetivos de esta tecnología también busca desarrollar una medida preventiva que pueda advertir a una persona si es prediabética, lo que podría permitirle cambiar su estilo de vida y evitar un estadio más grave de diabetes.
Por el momento y según informan, las pruebas estarían funcionando por lo que el siguiente paso es el de reducir de tamaño el prototipo, primero hasta tener uno similar al de un iPhone, para después poder integrarse en un futuro Apple Watch.
Según personas familiarizadas con el proyecto, el director ejecutivo de Apple, Tim Cook, el director de operaciones, Jeff Williams, y el jefe de hardware de Apple Watch, Eugene Kim, estarían todos involucrados en el proyecto, que ya ha costado cientos de millones de dólares.