Santiago. Lo que en 2014 parecía un prometedor proyecto para promover el turismo y dar oportunidades de empleo a los artesanos de Santiago, hoy día es el almacén y basurero de los negocios de la segunda planta.
La Plaza del Artesano, construida por la alcaldía de ese entonces, con una inversión de RD$23 millones, en la avenida Francia, casi esquina Las Carreras, en el área monumental, apenas operó unas semanas como tal. Lo que sí funcionan son dos negocios de comida y bebida en la segunda planta, y la parte de los artesanos se ha convertido en el depósito y parqueo de estos negocios, generando intranquilidad en el vecindario. La idea original, concebida para ser un atractivo turístico que conectara el área monumental a través de dos túneles, resultó en un proyecto incompleto y desfigurado. Los 78 módulos destinados a los trabajos de alfarería y artesanía quedaron abandonados y los artesanos volvieron a las calles como buhoneros.
Plaza desvirtuada
Erwin Vargas, ex secretario de Urbanismo del Ayuntamiento, explicó que la Plaza del Artesano fue diseñada para albergar actividades comerciales y atraer a turistas mediante un túnel debajo de la calle Francia, que conectaría con la plaza y el vecindario. Sin embargo, el proyecto ha sido alterado y dañado, transformándose en un negocio que perdió su propósito original.
Considera que la plaza nunca cumplió su cometido debido a que el representante de artesanos no era de fiar. Los túneles que debían ser un atractivo turístico, ahora son utilizados por “piperos” y talleres. La situación ha llevado a un deterioro progresivo de la plaza, que hoy se encuentra en estado de abandono.
La comunidad se ha visto afectada por el ruido y la intranquilidad que generan los negocios ubicados en la parte superior de la plaza, que operan hasta altas horas de la madrugada.
Comunitarios demandan autoridades intervengan
Los vecinos consideran necesario un mayor esfuerzo de las autoridades para rescatar este espacio. Angélica Pérez, residente en la parte atrás de la plaza, denunció que no pueden dormir hasta altas horas de la madrugada cuando cierran los negocios. Richard García denunció la alta contaminación a que están expuestos, porque el desagüe de estos negocios va a parar al vecindario.