Santo Domingo .-El cambio climático se ha manifestado en el país con las torrenciales lluvias que han provocado inundaciones en diferentes poblaciones, constituyen un caldo de cultivo para enfermedades infecciosas y las producidas por bacterias como es el caso de la leptospirosis, que este año ha tenido un aumento en su incidencia.
Es así como hasta mediados de noviembre se habían registrado un total de 585 casos, equivalente a un 74 % más que los notificados el año pasado, cuando la cifra ascendió a los 334 afectados por la enfermedad.
Según datos recogidos por la Dirección de Epidemiología, en su boletín de la semana 46, se notificaron 43 defunciones, para una tasa de letalidad de 7.4, mientras que la incidencia acumulada de leptospirosis es de 6.13 por cada 100 mil habitantes.
Aunque la enfermedad se encuentra en una zona de seguridad o control, su incidencia es al alza.
Pruebas tardan
El director de las Direcciones Provinciales y Áreas de Salud, Luis Rosario Socias, explicó a EL DÍA que las pruebas para detectar la leptospira tardan alrededor de 15 días para arrojar el resultado.
Detalló que la situación con las constantes lluvias los llevó a visitar los lugares donde se han presentado inundaciones y crecidas de los ríos, para darle a la población las dosis de doxiciclina, que es un tratamiento para contrarrestar la enfermedad bacteriana que suelen acarrear las aguas contaminadas por las ratas y otros animales.
La provincia con mayor incidencia acumulada fue Santiago Rodríguez.
Sus síntomas
La leptospirosis es una infección que se transmite por el contacto de los humanos con la orina de animales infectados, sean estos ratas, murciélagos y otros, ya sea en el agua o los alimentos.
Entre sus síntomas se encuentran fiebre alta, vómitos, dolor de cabeza, abdominal y muscular, por lo que en ocasiones se puede confundir con en el dengue.
Además, presenta enrojecimiento de los ojos, sangrado, náuseas y escalofríos.
Aunque los antibióticos sirven para atender la infección, de no tratarse a tiempo, la leptospirosis puede causar daños en el riñón y el hígado, además de causar la muerte al paciente.