Aunque está plenamente asentado entre los consumidores de música on-line y genera el 70% del total que las discográficas ingresan por el streaming, Spotify tiene cada vez más competencia. Deezer y sobre todo Apple Music llevan años creciendo en número de usuarios (todavía muy lejos, eso sí), y más rivales empiezan a asomar la cabeza.
El que hoy aterriza en España es bastante temible: Se trata de Youtube Music, un nuevo servicio personalizado para el usuario y sencillo de utilizar que dispone de toda la música que existe en YouTube y que es difícil de encontrar en otros sitios. Así, ofrece no solo vídeos musicales sino también álbumes oficiales, singles, remixes, actuaciones en directo y versiones, manteniendo informado al cliente de todas las novedades que se suban a la plataforma. Al igual que Spotify, tiene playlists especializadas muy competentes elaboradas por prescriptores especializados, y ofrece modalidad off-line para no gastar excesivos datos al usarlo en el móvil. Pero hay una serie de funcionalidades basadas en los potentísimos motores de búsqueda de Google (propietaria de YouTube) que supondrán un desafío para el actual líder del mercado de streaming.
YouTube Music ofrece recomendaciones basadas no sólo en lo que se ha reproducido anteriormente, sino también en dónde se encuentra el usuario (a través de geolocalización, que se puede desactivar) y lo que está haciendo en ese preciso instante, por ejemplo tomando un avión en el aeropuerto (para lo que recomendaría música para calmar los nervios) o en mitad de una estación de esquí (proponiendo temas que estimulen la adrenalina). Además, las búsquedas inteligentes facilitan la localización de las canciones incluso si no se recuerda cómo se llaman (indicando que se quiere encontrar «la canción del anuncio de Mediterráneamente» o «la canción que dice volando voy», por ejemplo). En el futuro, el servicio identificará incluso tarareos para buscar canciones que nos suenan sólo de oídas.
Este servicio, que en principio sólo tiene la desventaja de una calidad de sonido inferior a la de otros recién llegados (128 kilobytes por segundo, frente a los 320 kbps de Spotify), se ofrecerá gratis en la modalidad premium durante tres meses, y después costará 9.99 euros al mes, 14.99 euros si se escoge el plan familiar.
Según Ángel Navas, cofundador de la web especializada Industria Musical y Global Head of Trade Marketing para Ditto, «YouTube Music será otro intento de Google de terminar de convertir su astronómica audiencia free a un modelo de suscripción». A diferencia de Apple, el ecosistema Google «es mucho más difícil de monetizar mediante el pago directo, ya que es una audiencia que está acostumbrada a lo gratis, y la media del público que consume música vía YouTube, o es muy joven o son adultos que no le dan el adecuado valor a la música», asegura Navas, que se muestra «un poco escéptico sobre cómo serán los resultados finales. Dicho esto, que otra de las compañías más grandes del mundo apueste por aumentar el valor de la música es siempre una buena noticia, el mercado es muy amplio todavía y pienso que si YouTube logra convertir un porcentaje de sus usuarios a premium, por pequeño que sea, será un gran paso».
Hay otras dos plataformas nuevas, Tidal y Qobuz, que llevan ya varias semanas operando en nuestro país. Los responsables de Tidal,la plataforma ideada por el rapero Jay-Z, creen que «como en cualquier otra industria, el mercado de streaming ofrece espacio para los competidores». Así lo asegura a ABC Lior Tibon, Director de Operaciones a nivel global de esta compañía que pone el foco en «innovar y proporcionar al ecosistema de música y entretenimiento, el compromiso de reunir a artistas y amantes de la música para disfrutar de la mejor experiencia creativa posible». Ya están en contacto con muchos artistas y sellos en España «y vamos a seguir trabajando con ellos, de hecho ya hemos comenzado a producir nuestra serie «For The Cultura», que arrancó con la banda Izal y ya se puede ver en la plataforma».
Para su conquista del mercado español, el equipo de Tidal ha estudiado nuestros hábitos de consumo a fondo. «Los usuarios españoles consumen el doble de porcentaje de contenido en video que canciones en comparación con el resto del mundo», señala Tibon. «Y de los 52 países en los que TIDAL está disponible, España tiene el porcentaje más alto de miembros que escuchan listas de reproducción creadas por el equipo editorial». Así que la estrategia es clara: más contenidos audiovisuales, propios y exclusivos. «TIDAL ofrece un amplio catálogo de videos, más de 218.000. Y nuestra oferta incluye contenidos originales como la mencionada serie «For the Cultura», o el video-álbum «Lemonade» de Beyoncé, así como podcasts o livestreams». Hasta la fecha han transmitido más de cien eventos en directo conciertos y festivales para fans de todo el mundo, y para no descuidar otras sinergías con el boyante mercado de música en vivo, «también hemos regalado más de 300.000 tickets para asistir a eventos relacionados con el sector».
Tidal ofrece una altísima calidad de sonido (1.411 kbps) en la modalidad Premium (9,99 euros al mes), con posibilidad de aumento a un Hi-Fi (19,99€) que ofrece sonido con calidad de CD sin pérdidas. Se vende como una plataforma que «cree en el valor de la música» y las contribuciones de todos los artistas, «independientemente de si un artista está en una discográfica importante o es independiente», y proporciona «una de las mayores compensaciones a los autores e intérpretes», sin especificar la cantidad exacta por reproducción ya que en realidad, ésta depende de los acuerdos internos de los sellos con sus artistas.
Otra compañía de streaming que lleva poco tiempo funcionando en nuestro país (y que es todavía una desconocida) es Qobuz, cuya plataforma pretende, en principio, alcanzar un target distinto. «No estamos interesados una competición directa con Spotify», asegura su presidente en España, Denis Thebaud. «Creemos que la mayoría de nuestros clientes potenciales aún no usan plataformas en streaming, ya que aún no han encontrado lo que necesitan y requieren entre las ofertas principales que había hasta ahora». Con apenas un par de meses de funcionamiento, el principal objetivo de la empresa es «reforzar nuestra visibilidad y nuestra notoriedad ante el público español amante de la música de alta calidad, los audiófilos», explica Thebaud, «así como las personas que buscan una plataforma que satisfaga su necesidad de descubrir música. Qobuz es el único servicio que ofrece música en streaming y/o descargas en calidad desde CD a Hi Res». Ofrece tres calidades: MP3, alta resolución y calidad de CD, y cuesta desde 9,99€ al mes, dependiendo de la modalidad de suscripción), y aunque aún no cuenta con emisiones en directo, pero ofrece contenidos editoriales, artículos y recomendaciones. «También facilitamos una copia de los libretos completos de cada álbum, así como información completa pista por pista sobre los compositores, escritores, editores, músicos, ingenieros de sonido», explica Thebaud.
«El nuevo escenario puede llevar a la evaporización de la concentración de audiencia en una sola plataforma, diversificando el consumo», opina Navas. «La verdad es que en España, a nivel de streaming de audio, aún hay un líder muy claro y ese es Spotify. Pero eso no quiere decir que no le puedan acortar ventaja». Sin embargo, Navas cree que de haber una guerra de precios, ésta vendría originada por YouTube Music o Apple (que en otros países, crece ya a un mejor ritmo de usuarios premium que Spotify). «No podríamos esperar algo así de empresas como Tidal o Qobuz, más bien todo lo contrario, ya que son plataformas que apuntan a un upsale (técnica de venta por la cual un vendedor induce al cliente a comprar productos más caros y actualizaciones para hacer una venta más rentable) del modelo actual, con su oferta de sonido Hi-Fi o calidad master».
¿En qué posición de poder deja este nuevo escenario a los autores e intérpretes? Según Navas, « precisamente los autores no han sido los más beneficiados en la era streaming, más sí los interpretes y casas discográficas (dueños del máster, y no los dueños de la obra en sí)», y aunque es cierto que las nuevas plataformas suelen pagar más por cada reproducción, «esto no siempre se transforma en más dinero, ya que en muchos casos el volumen de reproducciones de esas plataformas es mucho menor». Sin embargo, por aquí sí podría llegar un beneficio derivado del aumento de competencia: «Lo que sí es ventajoso es que resta poder al monopolio de una plataforma (Spotify), y si un artista no es apoyado en ella, puede buscar opciones en el nuevo ecosistema del streaming».
El ecosistema del streaming
Spotify: Fundado en 2006 por el sueco Daniel Ek, tiene 160 millones de usuarios, 75 de pago. Calidad de audio: 320 kbps.
Apple Music: Fundado en 2015 por la compañía Apple, tiene 50 millones de usuarios. Calidad de audio: 256 kbps.
Deezer: Fundado en 2006 por los franceses Daniel Marhely y Jonathan Benassaya, tiene 12 millones de usuarios, 1,5 de pago. Calidad de audio: 320 kbps.
YouTube Music: Hoy se lanza en España y está disponible en 17 países. Las cifras de usuarios no han sido publicadas. Calidad de audio: 128 kbps.
Tidal: Fue lanzado en 2014 por la compañía sueca Aspiro, despúes propiedad del rapero Jay-Z. Las cifras de usuarios no han sido publicadas. Calidad de audio: 320 kbps.
Qobuz: Fundado en 2007 por el empresario francés Yves Riesel. Las cifras de usuarios no han sido publicadas. Calidad de audio: 320 kbps.
Tomado de https://www.abc.es/