Hasta ahora, un desafío clave para limitar la propagación del Covid-19 ha sido identificar a las personas infectadas
Investigadores japoneses han desarrollado un nuevo método basado en anticuerpos para la detección rápida y fiable del SARS-CoV-2, el virus que causa el Covid-19, que no requiere una muestra de sangre, y que pfrece los resultados en solo 3 minutos.
Un desafío clave para limitar la propagación del Covid-19 es identificar a las personas infectadas.
Hasta ahora, la identificación ineficaz de las personas infectadas ha limitado gravemente la respuesta mundial a la pandemia, y la alta tasa de infecciones asintomáticas (16 %–38 %) ha exacerbado esta situación.
El método de detección predominante hasta la fecha recoge muestras mediante frotamiento de la nariz y la garganta. Sin embargo, la aplicación de este sistema está limitada por su largo tiempo de detección (4 a 6 horas), alto coste y necesidad de equipo especializado y personal médico, particularmente en países con recursos limitados.
Un método alternativo y complementario para la confirmación de la infección por Covid-19 implica la detección de anticuerpos específicos contra el SARS-CoV-2 .
Actualmente, las tiras reactivas basadas en nanopartículas de oro se utilizan ampliamente para las pruebas en los puntos de atención en muchos países. Producen resultados sensibles y confiables en solo 10 o 20 minutos, pero requieren muestras de sangre recolectadas a través de un pinchazo en el dedo usando un dispositivo de punción.
Esto es doloroso y aumenta el riesgo de infección o contaminación cruzada, y los componentes usados del kit presentan un riesgo potencial de riesgo biológico.
Pero parece que con este nuevo parche se acaban estos problemas, según el estudio publicado en Scientific Reports .
Para desarrollar un ensayo de detección mínimamente invasivo que evite estos inconvenientes, los investigadores del Instituto de Ciencias Industriales de la Universidad de Tokio exploraron la idea de tomar muestras y analizar el líquido intersticial (ISF), que se encuentra en las capas de la epidermis y la dermis de la piel humana. «Aunque los niveles de anticuerpos en el ISF son aproximadamente del 15 % al 25 % de los de la sangre, aún era factible que los anticuerpos IgM/IgG anti-SARS-CoV-2 pudieran detectarse y que el ISF pudiera actuar como un sustituto directo del muestreo de sangre», explica autora principal, Leilei Bao .
Los investigadores han creado un parche compacto capaz de detectar los anticuerpos in situ en 3 minutos
Después de demostrar que ISF podría ser adecuado para la detección de anticuerpos, los investigadores desarrollaron un enfoque innovador tanto para tomar muestras como para probar el ISF. Primero, desarrollaron microagujas porosas biodegradables hechas de ácido poliláctico que extraen el ISF de la piel humana, explica Beomjoon Kim, autor principal. «Luego, construimos un biosensor de inmunoensayo basado en papel para la detección de anticuerpos específicos del SARS-CoV-2», añade.
Al integrar estos dos elementos, los investigadores crearon un parche compacto capaz de detectar los anticuerpos in situ en 3 minutos (resultado de pruebas in vitro).
Este novedoso dispositivo de detección tiene un gran potencial para la detección rápida de Covid-19 y muchas otras enfermedades infecciosas y puede usarse en muchos países, independientemente de su riqueza, que es un objetivo clave para el manejo global de las enfermedades infecciosas.
Tomado de ABC