La medida se aplicará a todos los vehículos eléctricos enviados desde China, lo que incluiría los fabricados por Tesla.
Ottawa se propone seguir el ejemplo de Estados Unidos e impondrá un arancel de 100 % a la importación de vehículos eléctricos chinos, según informó Reuters el lunes al citar a un funcionario del Gobierno canadiense.
La medida se aplicará a todos los vehículos eléctricos importados desde China, lo que incluiría los fabricados allí por Tesla. Los aranceles se aplicarán a partir del 1 de octubre.
El país norteamericano también impondrá un arancel de 25 % sobre el acero y el aluminio importados de China, según la agencia.
Las acciones del fabricante de automóviles más valioso del mundo cayeron más de 3 % tras el anuncio. El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, afirmó que Ottawa está tomando medidas para contrarrestar lo que calificó de política deliberada de China de exceso de capacidad.
«Creo que todos sabemos que China no juega con las mismas reglas», declaró a la prensa. «Lo importante de todo esto es que lo estamos haciendo en consonancia y en paralelo con otras economías del mundo», dijo Trudeau.
La Embajada china en Canadá calificó la medida como un «típico acto de proteccionismo comercial y dominio político», y añadió que Otawa ignora con ello las normas de la Organización Mundial del Comercio (OMC). La medida adoptada por Canadá socavará la normalidad de la cooperación económica y comercial entre ambos países y perjudicará a los consumidores y empresas canadienses, declaró un portavoz de la Embajada en un comunicado. «China pide a Canadá que respete los hechos objetivos, acate las normas de la OMC, corrija inmediatamente sus prácticas erróneas y se abstenga de politizar las cuestiones económicas y comerciales», agregó.
China es el segundo socio comercial de Canadá, aunque muy por detrás de Estados Unidos.