La explosión de un tanque de gas acabó con las vidas de tres niños en La Altagracia, lo que se atribuye a un escape del cilindro colocado en un humilde hogar de aquí.
Los cuerpos de los infantes, que apenas tenían 3, 4 y 12 años, quedaron calcinados tras la explosión que que llegó a una estufa donde se cocinaban alimentos en el momento del sinestro.
Según las versiones de vecinos, los cadáveres fueron encontrados entre los escombros que quedó la vivienda.
Alegan que las victimas fueron dejadas encerradas y que se presumen que son haitianos.
Tomado del periódico De Ahora