Santiago. Los bajos salarios han provocado una estampida que prácticamente ha dejado acéfalo el cuerpo de bomberos del distrito municipal de Hato del Yaque, lo que le hace incapaz de socorrer un llamado para sofocar un incendio.
De acuerdo a las denuncias, el local apenas cuenta con dos bomberos y uno de estos es su comandante el coronel Francisco Martínez, quien también debe fungir de chofer. Martínez asegura que los trabajadores apenas reciben como salario mensual 4,650 pesos y deben dar respuesta a una población que ronda cercano a los 40 mil habitantes. A estos e agrega, que los únicos dos camioncitos con que cuenta, uno es cisterna y ambos se encuentran dañados, lo que impide hacer los servicios.
Un equipo de periodistas de elCaribe visitó el local y se encontró con la sorpresa de que no tenían ni siquiera una secretaria que los recibiera y mucho menos alguien que tomara una llamada de emergencia en caso de un incendio u otra eventualidad.
Realidad
El coronel del cuerpo bomberil no se encontraba en el lugar y tampoco el otro bombero. Solo tres jóvenes que trabajan para el servicio emergencia 911 en la ambulancia asignada prestan servicio con regularidad. “Esta es la gran verdad, que los jóvenes vienen y cuando preguntan por el salario y le decimos, se van de inmediato”, dijo Martínez por teléfono a este medio de comunicación.
En el caso de Gurabo, de los tres camiones con que cuenta el cuerpo de bomberos, dos se encuentran arrumbados desde hace más de un año y un tercero está en proceso de mantenimiento.
El cuerpo bomberil, que presta servicio para comunidades de la parte norte del municipio cabecera de Santiago de los Caballeros, apenas cuenta con un personal de ocho integrantes. De estos, cuatro bomberos deben laborar con turnos de 24 horas corridas.
Falta de equipos impide responder a demanda
El personal que trabaja en el cuerpo de bomberos de Gurabo asegura que los dos camiones llevan más de un año averiados por falta de neumáticos y otras piezas por lo que su capacidad de respuesta es precaria. Gurabo cuenta con una población que se estima en 130 mil personas que aspiran sea convertido en un municipio por su progresivo desarrollo.