Yordaly Domínguez, un ciudadano que afirma haber sido descargado tras ser acusado de atraco, protagonizó un dramático incidente en el Palacio de Justicia de Santiago. Con dos galones de gasolina en mano, amenazó con prender fuego al edificio en protesta por la falta de devolución de la garantía económica que pagó hace tres años. Domínguez explica que, para cubrir los costos de su defensa, incluyendo el pago inicial de 25 mil pesos, tuvo que vender uno de sus riñones, lo que ha dejado su salud y economía en una situación crítica. A pesar de haber sido descargado, denuncia que ha sido víctima de un proceso burocrático injusto y que las autoridades lo han mantenido en un estado de incertidumbre y desesperación durante estos años. La situación fue controlada por las fuerzas del orden, pero el hombre sigue exigiendo una solución inmediata a su caso.
