SANTO DOMINGO.- Pese a la crisis mundial provocada por la guerra Rusia-Ucrania, República Dominicana cerrará 2022 como una de las economías de mayor estabilidad, crecimiento y paz del Caribe y Latinoamérica.
Las autoridades económicas prevén que este año cerrará con una expansión de entre 5 y 5.5 % del Producto Interno Bruto.
La inflación, que en abril se ubicó en casi 10 %, bajó a 8.63 % en septiembre.
Durante los primeros 9 meses del año, mayores ingresos en divisas por concepto de turismo (US$6,342 millones), remesas (US$7309 millones), inversión extranjera (US$2870.4 millones) y exportaciones (US$10, 543.3 millones) respecto a 2021, han fomentado estabilidad de la tasa de cambio y fortalecimiento de la moneda local.
Estos saludables resultados marcan importantes logros económicos para el gobierno del presidente Luis Abinader, a casi 10 meses del conflicto bélico en Europa, que ha provocado mayor desaceleración del crecimiento económico mundial así como incremento de los precios de los productos básicos, entre otros negativos efectos.
“Si el Banco Central no interviene y el Gobierno no da RD$60,000 millones en subsidios, la inflación habría superado el 15%”. (Magín Díaz, economista y académico).
En efecto, en 2022 el mandatario dominicano dispuso auxilios económicos puntuales para mitigar los efectos de la crisis mundial en la economía.
Entre ellos resalta particularmente el subsidio a la importación de combustibles.
Según cifras oficiales, en los primeros 9 meses de 2022 el Gobierno destinó más de 30 mil millones de pesos para evitar transferir a la población las alzas internacionales del petróleo.
También ha destinado subsidios al transporte, por un monto de 466 millones de pesos en el primer semestre del año, y a la producción o comercialización de alimentos, por más de 3 mil millones de pesos.
DESAFIOS
Pero tras mostrar resiliencia en 2022, ¿qué desafíos económicos esperan a la República Dominicana en 2023?
Según la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), en 2023 el contexto internacional seguirá siendo desfavorable para los países de la región ya que habría una desaceleración del crecimiento y del comercio mundial, con tasas de interés más altas y menor liquidez global.
“En el ámbito fiscal permanecerán altos los niveles de deuda pública en un gran número de países y, puesto que habrá una demanda alta de gasto público, se requerirán medidas que fortalezcan el rubro fiscal y el aumento del ingreso tributario”, señala el organismo.
En efecto, el aspecto fiscal se advierte como fuerte desafío para la estabilidad económica dominicana en 2023.
El gobierno prevé continuar destinando millonarios subsidios para contener las probables alzas en los precios de los combustibles y además para no subir la tarifa eléctrica.
Pero el país tiene una problemática fiscal estructural de que los gastos son más altos que los ingresos, pese al crecimiento económico, lo que resalta el economista Díaz.
Dijo que pese a que los ingresos totales aumentaron 1.4 puntos porcentuales más en 2021 que lo percibido hace cuatro años atrás (pasando de 14.2 a 15.6), la emergencia de la pandemia generó más deuda y más necesidad de gasto.
Al 31 de octubre de 2022, la deuda externa e interna del sector público no financiero totalizó en casi US%52, 500 millones, igual a más del 46 por ciento del PIB.
Resalta también el desafío de que la inflación baje hasta más o menos 4%, el rango meta contemplado por las autoridades monetarias.
EMPRESARIADO LLAMA AL OPTIMISMO EN 2023
No obstante, ese desafiante panorama en el sector privado las expectativas se mantienen positivas y se apuesta a la inversión, ha dicho el presidente del Consejo Nacional de la Empresa Privada, Pedro Brache.
Llamó a los empresarios a mirar con optimismo el año entrante y ejecutar sus planes de negocios o nuevos proyectos, ya que la economía dominicana se mantiene estable y con buen respaldo.