Santiago. Basura y plásticos llegaron desde comunidades de Jarabacoa arrastradas por el río Yaque del Norte para arropar la boca de la presa de Tavera, principal fuente de abastecimiento de agua potable de Santiago, Moca y de irrigación de tierras agrícolas de la Línea Noroeste.
En un recorrido hecho por reporteros de elCaribe se constató como las comunidades enclavadas en todo el entorno de la presa, así como pescadores y decenas de personas que viven del transporte en botes y yolas, se ven afectadas por estos desperdicios. Desde animales muertos, pedazos de troncos, botellas, vidrio y fundas plásticas, van hasta el punto que penetra el río Yaque del Norte hasta la presa Tavera en las comunidades La Cabra de Jarabacoa en La Vega y Jaguay, perteneciente al municipio Jánico en la provincia Santiago.
La presa Tavera permite servir agua potable a dos millones de personas en Santiago y la provincia Espaillat e irrigar aproximadamente 400 mil tareas.
Diógenes Abreu, quien lleva 22 años laborando en el transporte de personas, desde Tavera hacia lugares rurales donde solo se llega en botes y yolas, dijo que cada vez que llueve, la presa se ve afectada por toneladas de desperdicios que bajan desde el río Yaque.
“Esto sucede cada vez que llueve, con la crecida del río, entonces arrastra todo el plástico que producen las comunidades de Jarabacoa enclavadas en el Yaque del Norte y esto puede hasta causar que nuestros botes puedan dañarse por los troncos”, expresa Abreu.
En comunidades como Yaque Arriba, perteneciente a Jánico, los pescadores y quienes llevan sus reses a tomar agua, se ven afectados por la basura que llega hasta las orillas.
Proyectos para rescate
Entidades como la Sociedad Ecológica del Cibao, Plan Yaque y el Consejo para el Desarrollo Estratégico de Santiago, quienes han hecho estudio de los puntos críticos que presenta el río Yaque del Norte, plantean la necesidad de mayor intervención desde la cuenca alta hasta su desembocadura en el Océano Atlántico. En los proyectos de rescate y saneamiento del río Yaque del Norte, pactados por la Presidencia de la República y Compromiso Santiago, indican que se requiere intervenir con urgencia los 10 kilómetros lineales de la principal fuente acuífera a su paso por Santiago.
Consideran urgente intervenir los puntos afectados por la contaminación para asegurar la calidad de sus aguas, tanto para el consumo humano como para la irrigación de las empresas agropecuarias del Cibao. Los estudios establecen que el agua del río llega casi limpia a la ciudad de Santiago, pero en su curso eleva en promedio más de 350 % los diversos elementos contaminantes, entre estos, fósforo, amonio y nitrógeno.
También el amonio se eleva en 680 %; el nitrógeno accede a Santiago con 0.30 mg/l en el río y aumenta en 233.0 % y finalmente, toneladas de residuos y polvos incrementan la turbidez en 745.0 %. A esta contaminación química se le agrega otra de carácter biológico aún más grave de 20 millones promedio por millón de coliformes fecales y totales, lo que precipita que las aguas del río sean de altísimo riesgo para su uso directo o la utilización del mismo para los deportes acuáticos y de nado. “El Yaque Dormilón” o “El Cinturón de Santiago”, como en su momento le han llamado algunos poetas, también recibe una gran carga de contaminación de los arroyos y cañadas que desembocan en él. A pesar de los estudios, propuestas y proyectos, no se ha avanzado mucho en las propuestas de rescate.
Algunas propuesta para el saneamiento
Unos 400 metros del arroyo de Gurabo han sido saneados por diversas entidades en un proyecto que busca detener que más basura y contaminación lleguen hasta el Yaque. Aún falta un largo camino por recorrer en esta iniciativa de la JICA y apadrinado por la Asociación Para el Desarrollo Incorporada (APEDI), el Consejo Ecológico Medioambiental Dominicano (COEMAD), la Fundación Amigos Guraberos, la alcaldía de Santiago, organizaciones ambientalistas y juntas de vecinos, entre otras.
Tomado de https://www.elcaribe.com.do